Durante años cabildos de todo el país destinan importantes sumas de dinero en recuperación de espacios que la propia familia pudiera utilizar como centros de esparcimiento sano, acorde a todas las edades. La revolución “Salcedo” o “Contreras” al frente del cabildo del Distrito Nacional sin lugar a dudas ha marcado un antes y después en la administración del poder local, hasta lograr ser reconocidos por muchos en referente para los demás representantes municipales de todo el país.

Su efectiva política de recuperación y reacondicionamiento de espacios públicos para el disfrute de toda la familia, catapulta las autoridades municipales como “únicos” en su historia. Desde el lanzamiento del malecón libre y posterior a ello la recuperación total de Plaza Güibia, actividades como las piscinas en la avenida en tiempos de semana santa han mostrado que cuando se tiene voluntad política de trabajar para y por su pueblo es productivo y sus resultados notables.

En lo que a mi respecto, desde diciembre 2011, me he convertido en asiduo visitante de Plaza Güibia. Durante el día, doy mis vueltas, luego de largas jornadas de trabajo o previo a visitar el cine junto a mis sobrinos, algunas noches con amigos y familiares a compartir en un ambiente sano, etc., la realidad es que Güibia es única en la ciudad, sin embargo no puedo dejar pasar algunos aspectos que quizás no fueron vistos en el momento de su inauguración o posterior a esta.

A Güibia no le falta nada más que un puente peatonal. Es notoria la falta de parqueos en la zona para la gran cantidad de personas que la visitan y esto ha llevado a la improvisación de parqueos en terreros que se encuentran justo en frente a la majestuosa obra, sin embargo esto ha implicado los que visitamos dicha Plaza nos veamos en la obligación de cruzar una calle y que quizás pueda ser una de las más transitadas y más congestionadas en las horas pico en la ciudad.

Un puente peatonal para quienes cada día nos damos cita es sumamente importante y podría afirmar, sin temor a equivocarme, que este sería el sello de oro de la obra. Recuperar el espacio fue su primera misión, la siguiente es proteger al peatón, su público.

¿Qué podría costar un puente peatonal para Güibia? Estoy convencido que costará menos que una vida que pueda perderse. Estoy plenamente convencido que costará mucho menos que un niño accidentado por un vehículo al cruzar la avenida para llegar a su destino.

Un puente peatonal para Güibia cuesta menos… sobre todo cuando esta, es una inversión que protege a lo más sano de cualquier sociedad, SU GENTE.

En Twitter: @AmauryReyna