¿Se podrían algunos hacer llamar relevo?

Muchos juegan a ser diferentes, pero pocos lo logran. Y es que la inmensa mayoría de los que se hacen llamar “relevo”, se encuentran atrapados en el quehacer convertido en costumbre de aquellos que tanto critican.

Dicen, por ejemplo, que hay que trascender el clientelismo, pero son ellos los primeros que mandan al pueblo a hacer filas para entregar una que otras dádivas. Hablan de la falta de oportunidades y de “las trampas” a los que acostumbrados nos tienen muchos de los que hoy ostentan el poder político, pero son quienes políticamente, pretenden crecer sobre la base de las cenizas de unos cuantos.

Hay también quienes critican las ayudas que entregan los que electos fueron para hacer una cosa, pero lo único que han hecho bien, es repartir lo poco o mucho que reciben, y sin embargo, con el devenir del tiempo, esos autoproclamados “Relevistas”, terminan convertidos en los puentes canalizadores de esos sobrecitos que criticaron.

El quehacer político debe ser transformado, el liderazgo nacional, necesariamente debe ser renegerado, pero para lograrlo, hace falta mucho más que palabras, sobre todo cuando estas, no son siquiera acompañadas de acciones y propuestas concretas y coherentes con lo que se plantea en discursos.

Renegar la política, trabajar para trasformar nuestras organizaciones y adecuarlas a una sociedad que se encuentra viviendo las revoluciones del conocimiento y la tecnología al mismo tiempo, requiere de algo más que discursos, y al relevo, necesariamente le obliga a salir de la trampa de todas aquellas viejas prácticas políticas que alimentaron un cáncer que agónica tiene toda una clase, a la que el pueblo dio la espalda, resta importancia y ya no cree en ella, pero que la vota no por confianza, sino por unas pequeñas dádivas.

Según la proyección que ha hecho la Junta Central Electoral basado en lo que establecido está en la Ley de Partidos 33-18, en las elecciones primarias del próximo 6 de octubre, competirán más de 30,000 candidatos, y el gran reto no sólo será el de elegir lo mejor de lo que allí se presente.

Porque hoy más que nunca, nuestra sociedad requiere de hombres y mujeres que estén plenamente convencidos de cuál será el rol que deberán jugar no solo como representantes de un pueblo que les vota, sino como entes transformadores de sus organizaciones, para así poder impactar positivamente la sociedad, y así combatir con efectividad los males que generan todo tipo de pobreza en nuestra sociedad.

Amaury Reyna
Director del Grupo de Medios Naguero.com y productor de Naguero Radio (Trébol 99FM, Sábados de 8:00 a 10 de la mañana)

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